Desembarco del Rey

Se hace saber que hasta nueva orden está prohibido vender comida, suministros y madera a los nobles sublevados. Esperamos que el comercio pueda resurgir lo antes posible y se reanuden las relaciones habituales.

Se hace saber al reino que hasta nueva decisión, el Príncipe Real Rhaegar en su posición de Regente y Lord Protector, ejecutará las tareas de gobierno y recibirá a quien haga falta sentado al lado del trono. Que se difunda la palabra.

¡Que suenen gritos de algarabía y gozo, nuestro amado Rey Rhaegar, el primero de su nombre y linaje, ha sido coronado!

Se declaran tres días de festejos, se permite el establecimiento de espectáculos callejeros fuera de las murallas, y se concederá una luna de plata a todas las madres y las viudas pobres de Desembarco del Rey. ¡Que se haga su voluntad!

Se hace saber a los habitantes de Poniente que el Rey ha hecho aprobar las siguientes leyes:

-Todos los prostíbulos deberán pagar medio penique de cobre por cada cliente que tengan, no pudiendo cargarlo al precio del servicio. Los oficiales de impuestos anotarán los precios previos a la aprobación de esta ley para que sea cumplida sin excepciones.

-La diferencia entre precio de compra y el precio de venta del grano dirigido al pueblo no podrá ascender más de un 10%.

-Quedan eliminados los aranceles de importanción del grano. Los impuestos sobre ventas del mismo se mantendrán excepto en caso de hambruna.

-Si a las panaderías se les termina el pan por haber hecho demasiado poco teniendo suficiente harina, deberán vender los bollos al mismo precio para prevenir abusos.

-La corona asume el monopolio del comercio del azufre y el mercurio. Los productores seguirán cobrando lo mismo que hasta ahora, los mercaderes podrán seguir vendiendolo mediante la adquisición de licencias y el pago de un 1/4 del beneficio a la corona. Esta podrá dar y retirar licencia según crea conveniente.

-Los pagos y cobros de la corona tanto entre diferentes partes del consejo y sus burócratas como con aquellos que le ofrezcan servicios se harán con pagarés que se podrán cobrar directamente de la tesorería. Dichos pagarés serán contabilizados y controlados.

-Aquellos plebeyos que no posean nada y vivan de la caridad o aquellos hijos que no puedan heredar nada serán dotados una cantidad de tierra suficiente como para vivir de ella en las tierras de la corona allí donde no estén siendo cultivadas, con derecho a levantar una casa y un granero en las mismas.

-Aquellos plebeyos que vivan de la caridad y quieran seguir viviendo en Desembarco del Rey deberán trabajar limpiando y manteniendo las calles. Podrán obtener un permiso de residencia en la ciudad de la consejería del Escriba Mayor siempre y cuando prueben su trabajo.

-Aquellos que sean vagos y maleantes y no quieran trabajar serán reclutados forzosamente, enviados a galeras o expulsados de la ciudad según sea necesario. Ancianos, madres y niños exentos.

-Los gremios proveerán a viudas y huérfanos de sus miembros así como sus miembros que por accidente o causa natural hayan quedado inhabilitados de ingresos suficientes como para que no deban vivir de la caridad.

-Los artesanos capaces de cualquier oficio o talento que permita la ley podrán asentarse en Desembarco del Rey otorgándosele una parcela allí de donde se hayan marchado los indigentes y exhimiendo el edificio que erijan de impuestos sobre la propiedad durante diez años.

-Aquellos que no hayan pagado todos sus impuestos y que de forma voluntaria se avengan a pagar las cantidades atrasadas antes de que lo descubra el fisco no serán multados, pero deberán pagar la cantidad íntegra y presentar sus cuentas de forma anual junto con los debidos impuestos. Si lo descubre el fisco antes de que se presenten voluntarios se aplicará la pena habitual.

-Para facilitar el acceso a sus derechos y privilegios, los plebeyos podrán presentar sus peticiones, reclamaciones y quejas directamente ante cualquier oficial del reino, ya sea guardia, cobrador de impuestos, caballero, u otros, estando obligados estos a transmitirlo junto con sus correos hacia Desembarco del Rey y recibir la respuesta por el mismo medio.

-Se prohíben los castigos crueles y deshusados contra cualquiera en todo Poniente. La tortura solo será aplicable en los casos que lo requiera el señor o juez encargado.

-Se extenderán patentes de corso contra las naves que suministren bienes con fines bélicos a aquellas zonas controladas por los rebeldes.

-Todos los bienes y moneda propiedad de mercenarios que luchen por los enemigos de la corona serán expropiados, siendo entregada la mitad al gobierno de su país de orígen.

-Se prohibe la entrada de mercaderes extranjeros que comercien con los rebeldes o les ofrezcan préstamos. En caso de sean encontrados culpables de hacerlo a pesar de ser advertidos, sus bienes en Poniente serán confiscados siendo la mitad entregada a su gobierno de orígen, y el mercader devuelto a su país sin perjuicio físico alguno.

-Las penas por contrabando de bienes con fines bélicos serán el doble y se ordena que todas las patrullas de Poniente redoblen sus esfuerzos para evitarlo.

-Aquellos mercaderes, ya sea ponienti o extranjeros que ayuden en el esfuerzo bélico de forma continuada serán premiados con aranceles moderados y posibilidad de pagos fraccionados al fisco. Dichos beneficios se extenderán a partir de un año y medio exactos desde el principio de la colaboración. Dicha colaboración podrá ser pactada en cada caso y los beneficios se concederán acorde con ello.

Se hace saber a todo Poniente que el Rey acepta, acata y da la bienvenida a la tregua de los siete anunciada por el Septón Supremo.

Lord Arryn, Lord Baratheon y los representantes de sus casas menores vasallas tendrán paso seguro, derecho a escorta personal, llevar una espada por hombre y no más equipaje del necesario para efectuar tal viaje. La comida y bebida correrán a cargo de la corona durante su paso por el realengo.

También damos gracias públicas a la colaboración de Lord Tully en los esfuerzos de mantener el pueblo de Desembarco del Rey bien alimentado.

Se hace saber que el Rey está de camino a asistir a la boda Tully-Hightower junto con una parte importante de la corte y agradece las muestras de aprecio del pueblo. Mientrastanto se ha dejado al cargo de los asuntos de gobierno a Lord Tyrell.

También se hace saber que la quema injustificada de Lord Jon Connington, Consejero de los Ejércitos y las Flotas y Lord Paramonte de Tierra de Tormentas no quedará impune. Varios ejércitos se dirigen hacia Bastión de Tormentas para deponer el familiar del usurpador y loco que comanda lo poco que queda de las tropas Baratheon.

Hacemos un llamamiento a todos los lores y súbditos de señores que se han rebelado en su locura y les damos el perdón por ello pues es bien claro que no sabían lo que se hacían. Rezamos por sus almas y por las de aquellos que no siguen el camino de la rectitud.

Finalmente se anuncia el nombramiento de Lord Roland Connington en todas las posiciones ocupadas por su difunto primo. Un servicio religioso será realizado en la memoria de Lord Jon Connington a la vuelta de la boda.

Se hace saber que la corona no permitirá tratos diplomáticos con principados y repúblicas extranjeras que violen su jurisdicción. Que cualquier disposición específica que se salte tal exigencia del cumplimiento de la ley es declarada alegal y nula. Y que por lo tanto cualquier trato específico de permisos de acceso o arencelarios para con Lys o Pentos o cualquier otro lugar que no cuente con nuestra aprobación expresa no es válida.

También queremos expresar nuestro enojo por la decisión totalmente arbitraria de Pentos de perjudicar Poniente cuando en ningún momento hemos tomado cartas en su conflicto con Lys, ante el cual nos declaramos totalmente neutrales y exigimos que se retracten so pena de empeorar las relaciones comerciales.

Se hace saber que ante la petición de las casas Martell y Yronwood el Rey declara una tregua en las tierras de Dorne y que ningún ejército dorniense debe atacar cualquier otro ejército de dichas tierras sin mi consentimiento.

Dichos señores deben presentar su alegato de forma estructurada y clara con todas las pruebas que deseen aportar al Consejero de Leyes quien asistirá al arbitrio de las disputas que le han sido expuestas a Su Alteza.

Una vez expuestas las disputas, habiendo hablado los peticionarios y habiendo sido escuchadas las razones el Rey dictará arbitrio y por haberse acojido a él por propia voluntad y petición expresa de ambos deberán someterse a él.

Se hace saber que se felicita el éxito de la Casa Tully en la contienda contra los Frey y confirmamos las leyes y derechos de Entre Ríos. Declaramos que la casa Frey rompió vasallaje, entró en rebeldía, que como tal ya no posee título nobiliario alguno, y solo se ven exentos de la pérdida de sus títulos nobiliarios y tierras aquellos que se encontraban en tierras leales y no han alzado espada alguna contra la intervención. Declaramos así mismos extintos los derechos de la Casa Frey sobre cualquier tierra en Entre Ríos.

Se dispone que Lord Hoster Tully como Señor Supremo del Tridente pueda disponer de medidas de gracia a quien considere como digno después de analizar la situación en la propia tierra de los Rios.