Voluntarios para master

(la verdad que esto sí que me ha sorprendido)

Lord Balon Greyjoy se puso en pie. Ante él tenía a todos los grandes lores de Poniente y presidiendo la mesa el que se hacía llamar magnánimo y todopoderoso. Lord Admin. Su rustro endurecido por el salitre marino y el paso de los años sembrados de combates, permanecía impasible y frío. Pero su mirada ardía, ardía como ascuas en una forja. Y estaba forjando una afilada espada.

-Imagino que ahora viene mi intervención- dijo  mientras una sonrisa anidaba en su rostro dejando entrever una sonrisa maquiavélica.

-Antes de cruzar ninguna palabra con ninguno de los presentes quiero llamar la atención sobre la desfachatez de nuestro señor- dijo señalando los arrugados pergaminos colocados sobre la mesa -Mis conversaciones con vos Lord Admin, son hasta donde yo recordaba secretas. Si en vez de daros las razones que alego en esos manuscritos os hablara de mis problemas de cama, o de mis relaciones familiares, o incluso de mi propia salud... También las aventaríais a los cuatro vientos y os rasgaríais las vestiduras- acusó el Señor de las Islas de Hierro -No espero la aprobación de mis semejantes, pero no pienso cargar con la culpa de todos. Y desde luego no pretendía alterar el "buen" funcionamiento de vuestra "efectiva" maquinaria. Si hubiera querido hacer declaraciones públicas las habría hecho. Ni pretendo ser un incendiario, ni pretendo destruir vuestra titánica obra, un gran proyecto lo reconozco. Con una pequeño mensaje en vuestra plaza comunicando mi marcha hubiera sido suficiente. ¿Pero queréis espectáculo?

Yo no pienso vociferar, ni blasfemar, ni adjuntar bonitos documentos firmados por nadie -Por un momento Balon agachó la cabeza- Es cierto que ayer me deje llevar por la pasión. Otros asuntos, más personales castigaban mi mente. Y como os repetí varias veces no estaba siendo crítico. Creo que he aceptado las normas y reglas de vuestro juego. He agachado la cabeza cada vez que me negabais como un perro. Y os dije por activa y por pasiva que aceptaba vuestras normas... hasta un límite. Y por negarme a continuar, ¿me acusáis públicamente?

Lord Balón rio. Sus carcajadas hicieron eco en toda la sala.

-Queréis aclaraciones públicas. Solo voy a haceros unas pocas- Extrajo de su abrigo unas notas arrugadas, que más bien parecían los garabatos de un lunático.

-Yo mismo llevo diseñando un sistema desde que comprobé la ineficacia del vuestro, ¿que conocer los números y cuentas reservados a los eruditos me daría ventaja? Es cierto -arrugó las anotaciones, y lanzó la bola de pergamino al fuego de la chimenea, donde se consumió rápidamente.

-Buscabais una paz- Dijo entre dientes - ¿Tan difícil era crear una paz tensa en la que Lord Stannis se hubiera rendido? Sin comida para mantener a sus hombres Bastión no habría aguantado ni un año más. Habría firmado la paz. Una paz tensa, que era el escenario que buscabais- El señor de las Islas de Hierro levanto un afilado dedo  -Pretendíais dar igualdad todo el mundo no dándonos tropas, un craso error... en una paz tensa con todos armados la guerra habría tardado meses en estallar -Un segundo dedo se unió al primero -Pero si nos dais una flota insostenible, barcos y barcos con capacidad para transportar varias veces el límite total de tropas, ¿coherencia?

Algunos de los presentes asintieron

-Tropas que por otro lado, desafían las leyes de la lógica. Caballeros que esconden caballos en sus bolsillos y cuestan lo mismo que aldeanos con palos y piedras. Un sistema económico que depende de la geografía, muy bonito. Pero os olvidáis de toda la producción pesquera. ¿Pretendéis una paz y me avocáis a una guerra por necesidades del guión? Necesitaría mas dedos que barcos para poder seguir enumerando los fallos que fui pasando por alto.

Finalmente el gran marino y autoproclamado rey se derrumbó en su asiento dejando que su cuerpo cayera más de lo normal, y desde luego mucho más de lo que cualquier entendido recomendaría para la salud de la espalda. Tenía un aspecto derrotado.

-Lo dije una vez. Y nunca dejé de creer en vuestras leyes. -su voz era apenas un susurro, como las olas del mar en la lejanía- Me gusta, me gusta vuestro proyecto, y como os dije en su momento comparto vuestra ilusión. Pero veo mucha gente falta de ella aquí. ¿Queréis que abandone mi actitud? -De nuevo su mirada ardía con furia- ¿Queréis que hondee las cartas de Raeghar hablando sobre esclavitud, que siguiendo el guión nunca debieron ser escritas, o que demuestre que Lord Stark planea asesinatos, saliéndose del guión?

La gente murmuraba sorprendida.

-Si cuento con vuestro beneplácito, me gustaría posponer mi marcha hasta ver vuestros "arreglos"- el tono iba cargado de ironía, pero su mirada era seria. Seria y firme - Quiero ver vuestros cambios, vuestras mejoras. Hacedlas ley, y como ley las aceptaré. o en caso de no aceptarlas tomaré mi barco y partiré en busca del lugar donde duerme el sol. Y mis gritos de cólera jamás volverán a sonar en vuestros salones -Balon Greyjoy permaneció en silencio esperando una respuesta.

(Recalco que el hecho de que trascienda una conversación privada a un hilo público me parece una falta de respeto y privacidad magistral. Y si como veo he de cargar yo con toda la culpa presento mis más sinceras disculpas. Si lo hice en privado, fue por algo)